Las vacaciones son para disfrutar: comidas fuera de casa, helados, cenas largas, copas con amigos… y eso está bien. El problema llega cuando volvemos a la rutina y sentimos pesadez, cansancio o incluso culpabilidad. La primera semana es clave para retomar hábitos saludables sin castigos ni dietas extremas. Aquí tienes una guía sencilla de qué comer esos primeros días para recuperar energía, desinflamar tu cuerpo y volver a sentirte ligera.

1. Prioriza alimentos frescos y naturales

Después de varios días de excesos, tu cuerpo necesita volver a lo básico:

• Verduras de todos los colores (ensaladas, cremas frías, salteados).

• Frutas de temporada (sandía, melón, melocotón, uvas).

• Proteínas magras (pollo, pescado, huevos, legumbres).

• Grasas saludables (aguacate, aceite de oliva, frutos secos).

👉 Evita ultraprocesados, frituras y exceso de azúcar para darle un respiro a tu organismo.

2. Hidrátate bien

El alcohol, las comidas saladas y el calor suelen dejarte deshidratada.

• Bebe entre 1,5 y 2 litros de agua al día.

• Incluye infusiones digestivas (té verde, menta, jengibre).

• Aprovecha frutas con alto contenido en agua como melón o sandía.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recuerda que mantener una buena hidratación es fundamental para la salud y el rendimiento físico.

3. Desayunos ligeros y energéticos

Evita bollería o azúcares refinados que solo aumentan la fatiga.
Opciones recomendadas:

• Yogur natural con fruta y avena.

• Tostada integral con aguacate y huevo.

• Batido de fruta + proteína (yogur o leche vegetal).

4. Comidas equilibradas

Organiza tus platos con la regla del “plato saludable”:

• ½ verduras o ensalada.

• ¼ proteínas magras.

• ¼ carbohidratos integrales (arroz integral, quinoa, patata cocida).

Esto ayuda a sentirte saciada y a mantener la energía estable todo el día.

5. Cenas ligeras para descansar mejor

La cena no tiene que ser abundante. Mantén opciones fáciles de digerir:

• Crema de calabacín + tortilla francesa.

• Ensalada de garbanzos con verduras y atún.

• Pescado blanco al horno con verduras.

👉 Comer ligero por la noche mejora la calidad del sueño y evita levantarte con pesadez.

6. Evita “compensar” con dietas extremas

Un error común tras las vacaciones es saltarse comidas o hacer dietas demasiado restrictivas. Esto solo ralentiza tu metabolismo y aumenta la ansiedad por comer. La clave está en volver a la regularidad con 3-5 comidas nutritivas al día.

Conclusión
La primera semana después de las vacaciones no se trata de castigar tu cuerpo, sino de cuidarlo y devolverle el equilibrio. Con comidas frescas, hidratación y opciones ligeras, en pocos días recuperarás tu energía y volverás a sentirte activa.